Animal Experimentation
La Universidad de Salamanca se adhiere a la iniciativa que persigue mejorar la información a la sociedad sobre el uso de animales para investigación y docencia. Este manifiesto se hizo público el 20 de septiembre de 2016 promovido por la Confederación de Sociedades Científicas de España (COSCE) en colaboración con la Asociación Europea para la Investigación Animal (EARA).
El uso de animales continúa siendo el principal instrumento para generar conocimiento de los procesos biológicos básicos y desarrollar así nuevas técnicas y terapias que contribuyan al progreso de la medicina humana y animal. Muchos de los grupos de investigación de esta Universidad necesitan a los animales en sus estudios y trabajan activamente para la mejora de los trasplantes de órganos o tejidos, nuevos tratamientos para el cáncer de mama o la leucemia, terapias en trastornos neurodegenerativos, epilepsia y otros estudios de Biomedicina.
Las connotaciones éticas que implica la utilización de los animales en investigación y docencia comprometen activamente a los profesores. La Universidad como institución tiene que ser un vector de transmisión de dichos valores y garante de los requerimientos éticos y legales vigentes en la Unión Europea. Antes de comenzar las investigaciones con animales, los proyectos deben pasar una revisión por un comité ético multidisciplinar, regulado por la legislación nacional y europea. Este comité revisa los aspectos éticos y metodológicos que implica el proyecto en relación al uso de animales. Esta revisión implica que los proyectos sigan las premisas de Reemplazamiento de animales por otros métodos (cuando sea posible), el Refinamiento de las metodologías experimentales y, en definitiva, la Reducción del número de animales utilizados, que permiten mejorar el bienestar de los mismos durante los procedimientos.
La Universidad se ocupa de que el personal al cuidado de los animales, así como los investigadores que los emplean, cuenten con la formación necesaria para su manejo y cuidado. También, la Universidad de Salamanca (y los organismos públicos de los que depende) cuentan con recursos necesarios para el mantenimiento de instalaciones adecuadas que garanticen el bienestar y atención veterinaria de los animales, según estándares internacionales.